Los organizadores de esta peculiar forma de limpieza-protesta tratan así de alertar al Ayuntamiento de Cartagena y a la Consejería de Medio Ambiente de Murcia del deterioro de la zona.
Diego Jiménez. Cartagena, 19 agosto 2007.- En la mañana del pasado domingo, 19 de agosto, un grupo de 12 jóvenes se congregó a partir de las 12 del mediodía en el aparcamiento de la playa del Parque Regional de Calblanque para proceder a una limpieza-protesta simbólica de la playa de dicho enclave natural. Dichos jóvenes, entre los que se encontraban miembros y simpatizantes de la coordinadora 'La Región de Murcia no se Vende', Foro Social e Izquierda Unida, respondieron así a la llamada de alerta, tanto de vecinos del entorno del Mar Menor como de la Asociación AIKE, en protesta por el estado de suciedad y abandono de esta playa, frecuentada en esta época del año por multitud de bañistas, y asediada, tanto por las basuras que se acumulan en la misma, que nadie retira, como por los mosquitos, que hacen acto de presencia al atardecer, por lo que en el lugar de la protesta colocaron una pancarta con la leyenda “Murcia, qué hermosa eres cuando te limpian”, así como la tradicional de "La Región de Murcia no se Vende".
Denuncia y concienciación
La intención de las personas protagonistas de esta loable y excepcional operación de limpieza no era otra que alertar a las autoridades responsables del grave estado de suciedad de la playa. Pudimos comprobar, in situ, contenedores de basura, a rebosar, que nadie vacía, así como todo tipo de restos, tanto en la propia línea de playa como en las inmediaciones de la misma.
Álvaro Alcaraz, miembro de la Asociación AIKE Mar Menor y portavoz de los congregados, nos dijo que esta acción era una iniciativa particular de vecinos y vecinas del Mar Menor, y la calificó como un “tirón de orejas” a las autoridades responsables, tanto del Ayuntamiento de Cartagena como de la Consejería de Medio Ambiente. Calificó esta operación de “necesaria”, por la masiva afluencia de bañistas a esta playa, y postuló la necesidad de que se dote a la misma de patrullas de limpieza a pie, que cubran las zonas inaccesibles a los vehículos. Finalmente, Álvaro declaró que otro propósito de esta acción de protesta simbólica era el “que nos vea la gente”, a la que pidió, entre otras cosas, que no deposite las colillas y otros restos de basura en la arena, optando, dijo, “ante la inhibición de las autoridades competentes, por llevar una bolsa y depositarla, luego, en cualquier contenedor que encuentren al paso, en el camino de vuelta a casa”.
Sorpresa de los bañistas y colaboración
Provistos de bolsas de basura y guantes, la espontaneidad de la acción y la juventud de sus protagonistas sorprendieron a los bañistas que en ese momento del mediodía llenaban la playa, entre muestras de aprobación por parte de las personas usuarias. El grupo procedió a retirar basuras de todo tipo de la playa principal. Un grupo de bañistas se adhirió, espontáneamente, para colaborar con los jóvenes, mientras que otras personas les ofrecieron, incluso, refrescos, para ayudarles a mitigar el intenso calor que se registraba a esas horas en la playa. Al final, unos 70 kilogramos de detritus fueron retirados en bolsas, según nos dijo Paco, una de las personas participantes.
Espacio protegido
El Parque Regional de Calblanque-Monte de las Cenizas-Peña del Águila forma parte de una de las escasas zonas protegidas de la costa murciana, amenazada, tanto por el urbanismo descontrolado como, en el caso que nos ocupa, por la desidia de las autoridades. Concretamente, sobre este espacio natural planeó, hace unos años, la amenaza de su desprotección en parte, con unas pretensiones urbanizadoras paralizadas por la presión social y política. En el año 1987 se aprobó el Plan Especial de Protección de Calblanque. Por la Ley 4/92 de Ordenación y Protección del Territorio de la Región de Murcia se amplió el espacio y se reclasificó a Parque Regional. El P.O.R.N. fue aprobado por Decreto nº 45/1995, de 26 de mayo, y publicado en el Boletín Oficial de la Región de Murcia el 3 de julio de 1995.
Enclave emblemático
Calblanque es un enclave característico de zonas semiáridas. Con escasísima presión poblacional, pues sólo cuenta con los caseríos de las Cobaticas y Las Jordanas, el parque alberga tipos de hábitats del anexo I de la Directiva de Hábitats, en el que son prioritarios en las lagunas litorales la limonietalia, y zonas subestépicas de gramíneas. Aparecen también comunidades de palmitares y cornicales, junto a bosquetes de Tetraclinis articulata (el ciprés de Cartagena) y enclaves de carrascales termófilos. Numerosos endemismos e iberoafricanismos, como el taraje, pueblan así mismo el territorio, mientras que en la fauna son característicos el fartet (Aphanius iberus), que figura como especie prioritaria, y el sapo corredor y el lagarto ocelado en zonas de matorral.
Denuncia y concienciación
La intención de las personas protagonistas de esta loable y excepcional operación de limpieza no era otra que alertar a las autoridades responsables del grave estado de suciedad de la playa. Pudimos comprobar, in situ, contenedores de basura, a rebosar, que nadie vacía, así como todo tipo de restos, tanto en la propia línea de playa como en las inmediaciones de la misma.
Álvaro Alcaraz, miembro de la Asociación AIKE Mar Menor y portavoz de los congregados, nos dijo que esta acción era una iniciativa particular de vecinos y vecinas del Mar Menor, y la calificó como un “tirón de orejas” a las autoridades responsables, tanto del Ayuntamiento de Cartagena como de la Consejería de Medio Ambiente. Calificó esta operación de “necesaria”, por la masiva afluencia de bañistas a esta playa, y postuló la necesidad de que se dote a la misma de patrullas de limpieza a pie, que cubran las zonas inaccesibles a los vehículos. Finalmente, Álvaro declaró que otro propósito de esta acción de protesta simbólica era el “que nos vea la gente”, a la que pidió, entre otras cosas, que no deposite las colillas y otros restos de basura en la arena, optando, dijo, “ante la inhibición de las autoridades competentes, por llevar una bolsa y depositarla, luego, en cualquier contenedor que encuentren al paso, en el camino de vuelta a casa”.
Sorpresa de los bañistas y colaboración
Provistos de bolsas de basura y guantes, la espontaneidad de la acción y la juventud de sus protagonistas sorprendieron a los bañistas que en ese momento del mediodía llenaban la playa, entre muestras de aprobación por parte de las personas usuarias. El grupo procedió a retirar basuras de todo tipo de la playa principal. Un grupo de bañistas se adhirió, espontáneamente, para colaborar con los jóvenes, mientras que otras personas les ofrecieron, incluso, refrescos, para ayudarles a mitigar el intenso calor que se registraba a esas horas en la playa. Al final, unos 70 kilogramos de detritus fueron retirados en bolsas, según nos dijo Paco, una de las personas participantes.
Espacio protegido
El Parque Regional de Calblanque-Monte de las Cenizas-Peña del Águila forma parte de una de las escasas zonas protegidas de la costa murciana, amenazada, tanto por el urbanismo descontrolado como, en el caso que nos ocupa, por la desidia de las autoridades. Concretamente, sobre este espacio natural planeó, hace unos años, la amenaza de su desprotección en parte, con unas pretensiones urbanizadoras paralizadas por la presión social y política. En el año 1987 se aprobó el Plan Especial de Protección de Calblanque. Por la Ley 4/92 de Ordenación y Protección del Territorio de la Región de Murcia se amplió el espacio y se reclasificó a Parque Regional. El P.O.R.N. fue aprobado por Decreto nº 45/1995, de 26 de mayo, y publicado en el Boletín Oficial de la Región de Murcia el 3 de julio de 1995.
Enclave emblemático
Calblanque es un enclave característico de zonas semiáridas. Con escasísima presión poblacional, pues sólo cuenta con los caseríos de las Cobaticas y Las Jordanas, el parque alberga tipos de hábitats del anexo I de la Directiva de Hábitats, en el que son prioritarios en las lagunas litorales la limonietalia, y zonas subestépicas de gramíneas. Aparecen también comunidades de palmitares y cornicales, junto a bosquetes de Tetraclinis articulata (el ciprés de Cartagena) y enclaves de carrascales termófilos. Numerosos endemismos e iberoafricanismos, como el taraje, pueblan así mismo el territorio, mientras que en la fauna son característicos el fartet (Aphanius iberus), que figura como especie prioritaria, y el sapo corredor y el lagarto ocelado en zonas de matorral.
