jueves, 30 de junio de 2011

Presentadas en Murcia las Mesas Ciudadanas de Convergencia Social


La iniciativa, que partió el pasado mes de febrero en Madrid, trata de lograr la máxima confluencia social en contra del neoliberalismo impuesto.


Diego Jiménez/Murcia.- El pasado miércoles, día 29 de junio, tuvo lugar en el edificio Moneo de la capital murciana la presentación de las Mesas Ciudadanas de Convergencia Social (abreviadamente, Mesas de Convergencia). Con una notable asistencia de público, que abarrotaba el salón de actos, el acto contó en la mesa, como ponentes, con la asistencia del politólogo Carlos Martínez (presidente de ATTAC-España) y Armando Fernando Steinko, sociólogo, promotores de las Mesas de Convergencia, Alicia Poza, en representación del Foro Ciudadano de Murcia, Joaquín Sánchez, de la Alianza Regional contra la Pobreza y del Foro Social, y José Coy, miembro de la Plataforma de Afectados contra las Hipotecas, de la Asamblea de Parados de Molina de Segura y promotor, así mismo, de las Mesas de Convergencia.

La mesa estuvo coordinada por Andrea Nieto, activista social, integrante de Democracia Real Ya y del movimiento del 15-M, que fue dando la palabra a las personas invitadas.

Sobre el debate planeó la enorme crisis a que están sometidos los países de la Unión Europea y el Pacto del Euro, con referencias concretas a los casos de Portugal, Irlanda y Grecia, sin olvidar las duras políticas de ajuste previstas también, a corto plazo, para España, ante las que Carlos Martínez vaticinó, pues, un “otoño caliente”, al igual que José Coy, que animó al auditorio a no remitir en la resistencia necesaria ante los embates del capitalismo, mientras que A. Fenández Steinko advirtió que hay que seguir manteniendo, ante esta situación, una resistencia de ‘baja intensidad’, pero permanente.

Qué son las Mesas de Convergencia

El pasado día 19 de febrero tuvo lugar en Madrid el proceso de conformación de estas mesas, con la pretensión de su extensión a todo el Estado. Se pretende con ellas impulsar un proceso de acercamiento y convergencia de todos los sectores y sensibilidades de la izquierda para ir conformando una respuesta unitaria y eficaz a la situación que vive nuestro país y otros países de la Unión Europea. Es imprescindible promover la más amplia confluencia de fuerzas de la izquierda política y social, pues existe una posibilidad real, hasta ahora tenida por imposible, de que se produzca una regresión dramática de las conquistas sociales, democráticas y culturales de los últimos treinta años.

Las Mesas nacen, pues, con la voluntad de contribuir a aglutinar esfuerzos, con un espíritu no excluyente, y con el único requisito para su adscripción a las mismas de estar en contra del neoliberalismo que se nos impone. Así, en el espíritu fundacional de las mismas está la idea de revitalizar (en el ámbito más próximo de los barrios) los encuentros de personas para propiciar la reflexión colectiva y el debate político, como pasos previos a la acción.


Tanto en la exposición, como en el debate posterior, se analizaron temas tales como la ilusionante eclosión del movimiento del 15-M, la contradicción aparente del nacimiento de esta protesta ciudadana en paralelo con el importante triunfo electoral del PP, las necesarias relaciones de cooperación respetuosa entre este movimiento y los distintos foros que plantean respuestas ciudadanas a la crisis del capitalismo, las limitaciones de la izquierda tradicional para articular, en solitario, respuestas a esta crisis, la necesidad de impulsar el debate crítico y la reflexión política de la ciudadanía, etc.

Se coincidió en que no hay que bajar la guardia, pues el caso griego es un serio aviso de por dónde van a discurrir los severos ajustes en los distintos países de la UE, ante los que hay articular respuestas contundentes, como las distintas movilizaciones previstas en nuestro país y en otros del continente en los próximos meses.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí, el problema que gravita ahora mismo sobre el importante momento que vivimos es -uno más si se quiere-; las limitaciones de la izquierda tradicional para articular respuestas a la crisis económica y de valores.
Hasta hoy, la izquierda ha sido: feminista, anticapitalista, republicana, anticlerical, orgullo gay, ecologista... y claro, hay muchos que no cabemos en todo esto que nos suena lejano. Las piezas de museo son para los museos (sean los obispos o sean los republicanos históricos). Y esto, reconociendo el valor de muchos republicanos como tú y el valor de mucha gente de Iglesia que no son obispos. De partida el respeto, pero no podemos ya pedir a toda la izquierda (por llamar algo a "esto") que tire "p'alante" con todo. Yo al menos no.

Vamos a partir de lo elemental y a trabajar: La justicia real, la igualdad, la solidaridad transparente. Y poco más.

Saludos y ahí estamos todos.

Diego J. dijo...

En la izquierda que yo creo, caben, desde el más absoluto respeto a las particularidades de cada cual, todas las posiciones y sensibilidades.

Saludos