https://www.laopiniondemurcia.es/opinion/2022/12/19/ferrocarril-convencional-vertebra-region-80191348.html
(Imagen: Wikipedia)
Desde mi picoesquina
El ferrocarril convencional sí vertebra la
Región
Cuando
estas líneas vean la luz, se habrá producido ya, con todo boato, la
inauguración oficial de la llegada del AVE a Murcia. Un AVE que despierta reticencias
por parte de una derecha crítica con la excesiva duración del viaje a Madrid,
obviando que ello es consecuencia directa de ese absurdo itinerario por Alicante,
‘gracias’ al Pacto del AVE de Murcia suscrito el 8 de enero de 2001 en el
palacio de San Esteban entre Francisco
Álvarez-Cascos y los presidentes autonómicos Ramón Luis Valcárcel, Eduardo Zaplana, Alberto Ruiz-Gallardón y José
Bono, pacto que condenó al ostracismo a la línea tradicional
Cartagena-Chinchilla y nos hizo depender de la zona ferroviaria de Valencia,
según nos ha recordado una y otra vez Joaquín
Contreras, portavoz de la Plataforma Prosoterramiento.
Nuestra
Región de Murcia es, hoy, un desierto ferroviario. La obsesión por volcar el
flujo de mercancías y personas por carretera y por la potenciación del AVE ha
llevado al desprecio del ferrocarril como elemento vertebrador de nuestras
comarcas. El cierre de la línea de ancho ibérico Murcia-Caravaca, que estuvo
operativa hasta 1971, se justificó por razones de escasa rentabilidad. Por
idénticos motivos, el ferrocarril Almendricos-Baza-Guadix dejó de
prestar servicio el 1 de enero de 1985. Esas líneas clausuradas sentaron el
precedente para la nefasta suspensión actual de los trenes
Cartagena-Chinchilla, justificada, dice ADIF, por las obras del soterramiento
en Barriomar, olvidando que siempre estuvo abierta la posibilidad de utilizar provisionalmente
la estación de Nonduermas, que hubiera evitado el flujo de pasajeros hasta
Albacete por carretera.
LA LÍNEA CARTAGENA-ALBACETE HA DE SEGUIR
SIENDO PRIORITARIA. Por razones de utilidad social, por economía y por
sentido común, se impone recuperar el servicio ferroviario entre Cartagena y
Albacete, con vías desdobladas y electrificadas. Esa línea sí que vertebra el
territorio regional.
En fecha
30 de enero de este año, Josep Vicent
Boira, comisionado del Gobierno para el Corredor Mediterráneo, afirmaba en
una nota de prensa que la línea Cartagena-Chinchilla pasa a la primera división
de la Red Europea de Transportes. A este respecto, Antonio del Campo, responsable del Gabinete Técnico de Infraestructuras
en CCOO, nos recuerda que el pasado 11 de noviembre concluyó el plazo de
presentación de enmiendas para la Red Básica Europea de Ferrocarriles y
mantiene, así mismo, que se da prioridad al eje Cartagena-Albacete, actuación
que, en todo caso, no va a ser inmediata. Nos recuerda que las inversiones europeas
en materia ferroviaria contemplan tres variables: la Red Básica Prioritaria,
con horizonte temporal en el 2030 y en la que entraría esa línea; la General,
prevista para el 2040, y la Ampliada, para el 2050. En todo caso, a la hora de
considerar el trazado de esta nueva línea Cartagena-Albacete hay que tener en
cuenta que debe hacerse el Estudio de Detalle y la Declaración de Impacto
Ambiental durante al menos tres años.
Respecto
de esa futura línea mejorada, Joaquín Contreras, que también sigue apostando
por que sea prioritaria, me hizo una observación importante: el ferrocarril
Cartagena-Murcia-Albacete sería la salida natural de Almería y Granada (si se
consolida la recuperación del ferrocarril Baza-Lorca, del que luego hablaremos)
hacia Madrid, mucho más ventajosa que por Despeñaperros.
Empero, si
de vertebración regional ferroviaria hablamos, hemos de considerar otras
actuaciones.
EL CORREDOR MEDITERRÁNEO. Consiste en una plataforma de
ancho internacional y de alta velocidad, que discurre desde la frontera
francesa hasta Algeciras. Infraestructura necesaria que impulsará la economía,
el turismo y el empleo pero que está pensada sobre todo para el transporte de
mercancías. De hecho, en la página web ‘Quiero corredor’, de la Asociación
Valenciana de Empresarios (AVE), citada por Ángel Martínez (El ferrocarril en la Región de Murcia 1 y 2), denuncian
el retraso de más de 25 años que acumulan las obras de este corredor y exigen
al Ministerio una línea exclusiva de mercancías desde Monforte del Cid hasta
Murcia. La redacción del estudio de la misma se publicó en el BOE el 8 de
noviembre de 2011, sin que llegara a adjudicarse. La novedad es que esa línea
de mercancías, según esta asociación, no debería atravesar Murcia, sino que
habría de ir en paralelo a la autovía A7 para conectar, a la altura de
Santomera, con los corredores de Cartagena y Albacete y continuar hasta Lorca y
Andalucía.
A este
respecto, Contreras nos recuerda que, efectivamente, el Corredor Mediterráneo
llega hoy sólo hasta Monforte, con doble vía de ancho internacional, y que, por
ahora, está previsto que las mercancías pasen por Murcia por el túnel soterrado,
un peligro por el tránsito de graneles, productos tóxicos, etc., en caso de
accidente. Opina, además, que las vías
para mercancías deberían ser diferenciadas de las de viajeros.
EL ACCESO A CARTAGENA Y EL FERROCARRIL A
BAZA. Varios barrios cartageneros afectados por el trazado propuesto
por ADIF para la entrada del AVE a la ciudad vienen oponiéndose al mismo, por
el efecto barrera de las vías, y apuestan por la propuesta número 5, es decir,
la entrada a la estación ‘Víctor Beltrí’ -convertida en una estación intermodal
que acogería el FEVE Cartagena-Los Nietos- con un trazado paralelo a la
carretera de La Unión.
A este
respecto, Fulgencio Sánchez,
portavoz de la plataforma ‘Tren a Cartagena’ y presidente de la Asociación de
Vecinos del Sector Estación, denuncia que, en estos momentos, pese a que hay
tramos del AVE en obras en el sector de Riquelme-Torre Pacheco, no hay proyecto
claro para la entrada del tren a Cartagena y, además, se produce una
preocupante dilación de las reuniones. La prevista para noviembre, no se ha
celebrado. Este portavoz aclara que la reivindicación vecinal actual no es
tanto sobre la llegada del AVE sino sobre la exigencia de una línea moderna,
electrificada y con el trazado antes citado, que, además, es más barato que el
propuesto por ADIF.
En
relación con la antigua reivindicación de la reapertura del ferrocarril
Almendricos-Baza-Guadix, Antonio
Francisco Martínez, de la Asociación ‘Amigos del Ferrrocarril de Baza’, nos
dice que nadie daba un duro por la reapertura de esa línea, pero en marzo de
2021, en Almería, se consiguió del ministro Ábalos el compromiso del inicio de un estudio informativo de
viabilidad, que llevan a cabo dos empresas adjudicatarias con un plazo de 24
meses.
Nos dice
que el coste de las obras, unos 800 ó 900 millones de euros, entre Guadix y
Lorca no es un obstáculo; es cuestión de voluntad política. La situación actual
es de parálisis desde los meses del pasado verano, pero el Ministerio afirma
que se va a compensar la situación en 2023, de modo que en 2024 pueda remitirse
el estudio informativo a la Unión Europea para la financiación de las obras.
Y LAS CERCANÍAS. La
vertebración regional propuesta sería incompleta si no se considerara la
situación de los trenes de cercanías en la Región. A este respecto, hay que mantener
y mejorar el eje este-oeste (Alicante, Murcia, Lorca, Águilas), potenciar el
eje sur-norte (Cartagena-Murcia-Cieza-Hellín) y recuperar la clausurada
conexión Calasparra-Cieza (hoy, vía verde), con un tren lanzadera para unir ambas
poblaciones, pues el cierre de la estación de Calasparra y el levantamiento de
las vías, algo que lamenta José María
Rodríguez, de IU Cieza, ha dejado
incomunicadas a más de 110.000 personas del Noroeste murciano e incluso del
Altiplano granadino, según expuse en mi artículo de LA OPINIÓN de 2 de abril de
2019.
Hay que
potenciar también el intercity Cartagena-Albacete y considerar la posible
conexión del Altiplano con Murcia, con una línea que uniría la capital con
Fortuna, Abanilla, Jumilla y Yecla, propuestas de mi amigo Juan Antonio Conesa, de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril,
que también advierte de la desaparición de la conexión con Alcázar de San Juan,
por el nuevo trazado del AVE. Para terminar, no podemos olvidar la prolongación
del FEVE Cartagena-Los Nietos hasta Cabo de Palos, La Manga y, por qué no,
hacia localidades ribereñas del Mar Menor.
Diego
Jiménez García. Profesor de Geografía e Historia
@didacMur