sábado, 1 de diciembre de 2007

Concentración de denuncia en el murciano jardín de San Esteban





LA PLATAFORMA CONTRA LA CONSTRUCCIÓN DE LOS APARCAMIENTOS EN EL CENTRO DE MURCIA PIDE UN GESTO DEL ALCALDE, LA UNIVERSIDAD Y LAS ENTIDADES SOCIALES MURCIANAS PARA MODELAR UNA CIUDAD MÁS HUMANA Y HABITABLE.

Diego Jiménez. Murcia.-
Continúa la polémica. Hace ya más de dos años, el Ayuntamiento de Murcia adjudicó las obras de construcción de dos aparcamientos subterráneos en el centro de Murcia, en la avenida de la Libertad y en el Jardín de San Esteban, a un consorcio de una Unión Temporal de Empresas (UTE) del grupo ‘La Generala’, y en la que participa una empresa desconocida ligada al vicesecretario del PP de Orihuela, Manuel Abadía. La reacción vino, de inmediato, de un significativo sector la sociedad civil murciana -con el apoyo de los partidos políticos PSRM-PSOE e IU-, molesta porque las obras iban a suponer un deterioro de la calidad de vida en el centro, un aumento del efecto llamada del tráfico, el peligro para las edificaciones colindantes, el traslado del tradicional mercadillo de artesanos y vendedores ubicado junto a un conocido centro comercial, y la destrucción de un jardín emblemático, el de San Esteban, históricamente ligado a la ciudad desde su construcción en el siglo XVI, y que alberga restos arqueológicos importantes, además del actual palacio, sede del Gobierno regional, en su día colegio de jesuitas erigido en el siglo XVI.

Se constituyó una Plataforma contra los citados aparcamientos, integrada por la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos y Usuarios, Ecologistas en Acción, Murcia-Acoge, Facua-Consumur, Área de Transportes de UGT, Área de Transportes de CCOO, Sindicato SIME, Foro de Vistalegre, Asociación Cultural de Vendedores y Artesanos de San Esteban, Asociación de Padres de Alumnos del Carmen, Representantes de Vecinos de la Zona, PSRM-PSOE e IU+Los Verdes, que ha logrado reunir más de 62.000 firmas de vecinos y vecinas contrarias a dichas obras, sin que el Ayuntamiento de Murcia, cuyo alcalde siendo concejal de la oposición en 1992 se manifestó contrario al proyecto, se muestre ahora dispuesto a dar marcha atrás.

Concentración de protesta

La plataforma ha retomado las movilizaciones de protesta. La última tuvo lugar en la mañana del pasado sábado, 1 de diciembre, al mediodía, en el jardín de San Esteban. En el acto se exhibían carteles de denuncia, con la sencilla leyenda “Parking no, jardín, sí”, un dossier de prensa con las acciones anteriores de la Plataforma, paneles explicativos de los valores histórico-culturales del jardín y música ambiental, para dar un carácter festivo-reivindicativo a un acto que, quizás por las fechas prenavideñas en que nos encontramos y debido, sin duda, a la multitud de actividades sociales y culturales que en estas señaladas fechas del año registra la ciudad, no ha contado con el apoyo esperado. No obstante, un centenar de personas se concentró en el lugar, arropadas por otras conocidas de la vida social y política, como Paco Morote, del Foro Social, Miguel Ángel Esteve, de Ecologistas en Acción, José Manuel Abellán, José Zapata Ros y Rafael González Tovar, del PSRM-PSOE, y Esther Herguedas, concejala de Izquierda Unida+Los Verdes, junto a Nacho Tornel, ex candidato de esta formación política en las pasadas elecciones municipales, y Diego Jiménez, responsable de Movimientos Sociales de este mismo partido.

Acción simbólica y declaraciones

Como acto simbólico de denuncia de la futura destrucción del jardín y para reivindicar el valor cultural y ambiental del arbolado existente en el mismo, se procedió a la plantación de un pequeño ejemplar de acebuche (olivo silvestre), árbol autóctono de la Región, en el centro de este espacio.

Previamente, habíamos podido conocer el parecer del portavoz de las personas concentradas, el vecino de Vistabella Fernando Navarro, quien denunció el desprecio municipal a las 62.000 firmas de ciudadanos y ciudadanas que se oponen a estas obras, al tiempo que afirmó que esta “política cínica y perversa, obcecada por un absurdo planeamiento urbanístico, encandilada por el precio del suelo, ignora que San Esteban está ligado a Murcia desde su fundación por Abderrahmán II. Nos recordó que San Esteban es el jardín más antiguo de la ciudad, situándose su origen en 1550. “Queremos consolidar este jardín como espacio verde para el disfrute de la gente”, afirmó, pues “el Ayuntamiento no toma en cuenta los preocupantes niveles de CO2, quiere entregar la ciudad al coche, como cuando en 1953 se la partió en dos para construir la Gran Vía”, denunció. Fernando se preguntó: “¿Qué modelo de ciudad quieren legar a nuestros hijos?”. Por eso, este vecino nos adelantó la acción de la que arriba hemos dado cuenta: “Vamos a plantar aquí un acebuche, un árbol muy longevo. Esperemos que crezca para que puedan verlo muchas generaciones futuras”. Para añadir a continuación: “Esperemos un gesto de nuestro alcalde, y que junto con la Universidad y otras instituciones murcianas seamos capaces de diseñar una ciudad más humana y habitable”, en la medida, dijo, que “cuando es común que en verano soportemos hasta 42 grados a la sombra, lo que necesitamos son árboles, no pérgolas ni maceteros”.

Ana Fernández, otra vecina concentrada en el lugar, nos alertó de que, sospechosamente, la Unión Temporal de Empresas (UTE) que logró la adjudicación de las obras se había constituido como tal sólo unos 14 días antes de tal concesión, mientras que Esther Herguedas, concejala de IU+Los Verdes en el consistorio murciano, cree que el inicio de las obras va a posponerse, por cuestiones electorales, hasta después de la cita con las urnas del próximo mes de marzo, al tiempo que denunció que, según cálculos hechos por IU+Los Verdes, estas obras van a suponer nada menos que un trasiego de unos 70 camiones/hora, durante diez meses y seis horas diarias, con las consecuentes molestias, polvo y caos circulatorio que van a generar.

Con la lectura de un comunicado de denuncia, concluyó la concentración. El texto del comunicado, breve, es el que sigue:


LOS ABAJO FIRMANTES, CIUDADANOS Y CIUDADANAS DE MURCIA, RECHAZAMOS LA CONSTRUCCIÓN DE LOS APARCAMIENTOS PROYECTADOS EN LA AVENIDA DE LA LIBERTAD Y EN EL JARDÍN DE SAN ESTEBAN, Y REIVINDICAMOS NUESTRO DERECHO A VIVIR EN:

· Una ciudad saludable y habitable, con menos ruido, menos contaminación atmosférica y menor congestión de tráfico. Que potencie los transportes públicos y los modos de desplazamiento menos agresivos ambientalmente. Una ciudad en la que los barrios dispongan de los servicios necesarios en la vida diaria, y se reduzca el número de desplazamientos forzados a lugares alejados.

· Una ciudad para la convivencia, con espacios públicos de encuentro libres de vehículos. Donde la gente se sienta a gusto y en la que se pueda disfrutar de más zonas verdes con arbolado, zonas peatonales, espacios deportivos y zonas culturales.

· Una ciudad respetuosa con los problemas ambientales, implicada en la lucha contra la reducción de la capa de ozono, la pérdida de biodiversidad o el cambio climático.

· Una ciudad sin barreras, donde la accesibilidad y los desplazamientos de personas con movilidad reducida no supongan un problema insalvable.

· Una ciudad próspera, puesto que la movilidad sostenible favorece la actividad económica.

· Una ciudad participativa, en la que las decisiones importantes conlleven un claro proceso de información, consulta y debate ciudadano.

Por todo ello denunciamos el actual modelo de diseño de la ciudad de Murcia, que prioriza el uso del coche sobre otros medios; que deshumaniza el paisaje de nuestra ciudad y disminuye la calidad de vida de sus habitantes; que niega nuestro patrimonio social, histórico y ambiental; que exige cada vez mayores espacios para los aparcamientos; y que favorece planes de desarrollo urbano que benefician a unos pocos y perjudica a todos.