Murillo estuvo acompañado de los cónsules de Ecuador en Murcia y Valencia, del embajador de ese país y del Subsecretario del nuevo Ministerio de emigrantes.
Diego Jiménez. Murcia, 15 de julio de 2007.- Los buenos oficios y la perseverancia en estrechar las relaciones entre la Comunidad murciana con los pueblos oprimidos del centro y sur de Latinoamérica por parte de Vicente Cervantes, miembro de Arcoiris y Azogue, dio sus frutos el pasado domingo, día 15, al lograr la visita a Murcia y Lorca del encargado del nuevo Ministerio de Emigrantes de Ecuador, William Murillo, miembro de la Secretaría Nacional de Migrantes (SENAMI) con rango de ministro, quien, en su visita a Murcia, estuvo acompañado de los cónsules de Ecuador en Murcia y Valencia, Patricio Garcés y Gabriel Monje, del embajador de ese país andino, Nicolás Issa Obando, y del Subsecretario de Migraciones, Óscar Jara.
PERIPLO POR LA REGIÓN
El encuentro con una nutrida representación de la colonia de trabajadores inmigrantes ecuatorianos residentes en Murcia se dio, en sesión matinal, en el salón de actos del Edificio de Usos Múltiples de la Delegación del Gobierno en Murcia, sita en la Avenida Alfonso X El Sabio de la capital, mientras que, por la tarde, se reunió con representantes de la colonia ecuatoriana en Lorca, en el Complejo Deportivo-Festivo “Las Américas”.
William Murillo llegó a la puerta de la Delegación del Gobierno en Murcia pasadas las 10:30 de la mañana. Allí le aguardaban los representantes de los medios de comunicación regional y un nutrido grupo de compatriotas que lograron, a petición del propio ministro, departir unos momentos y fotografiarse junto al joven mandatario. Acto seguido, se produjo la comparecencia en el salón de actos, acompañado de las personalidades arriba citadas. Terminado el acto, se desplazó a Lorca, para completar la visita en comida de hermandad con los inmigrantes de esa comarca del Valle del Guadalentín.
INTERVENCIONES
William Murillo comenzó saludando y, tras anunciar la próxima visita a Murcia en octubre del presidente electo de Ecuador Rafael Correa, recordó a los inmigrantes presentes en la sala su propio origen de emigrante, pues a los 19 años marchó en situación irregular a Estados Unidos, viaje en el que invirtió un total de 39 días. Recaló en Nueva York, donde trabajó limpiando coches, como jardinero, vendedor temporal, ayudante de mecánico, fregando platos… por lo que, dijo, “conozco la situación en que viven ustedes, y soy sensible a sus necesidades”.
Pasó, seguidamente, a definir el nuevo Ministerio, la Secretaría Nacional de Migrantes, como el resultado de una oferta electoral, ahora hecha realidad, del presidente Correa. Desde ese nuevo Ministerio, dijo tener la intención de que este organismo recién creado se convierta en un centro referencial para la defensa de los derechos humanos.
Como realizaciones inmediatas en estos primeros cien días de Gobierno, enumeró algunos objetivos cumplidos y por cumplir, como el establecer y ejecutar políticas, planes, programas y proyectos participativos, que permitan mejorar las condiciones de vida de los emigrantes, sus familias y su entorno. Y esbozó otros objetivos más concretos y ambiciosos de la SENAMI, tales como apoyar, desde el Estado ecuatoriano, la regularización de los ecuatorianos en el exterior; garantizar la soberanía nacional y auspiciar la integración latinoamericana; luchar por un salario digno, y auspiciar el desarrollo local, la competitividad y la sostenibilidad macroeconómica del país. Y como proyectos inminentes, anunció el lanzamiento de una página web de información para el colectivo inmigrante, el Convenio con España para capacitación técnica y la creación del Banco del Migrante, con posibilidad de que las personas emigradas en el exterior puedan adquirir acciones de la entidad para capitalizarla.
Murillo dio a conocer el Convenio de cooperación institucional entre la SENAMI y la Universidad ecuatoriana de Cuenca que va a permitir la creación de la Universidad del Migrante, para continuidad de estudios a cualquier nivel de quienes no pudieron hacerlo en Ecuador, y que, por medio de Internet, puede ser una realidad. Anunció los trabajos tendentes a la consecución de la doble nacionalidad y el logro de haber enviado a España, con ayuda venezolana, a los 3.000 ciudadanos de Ecuador afectados por el “caso” de Air Madrid. Otra de las realizaciones recientes ha sido la firma de la SENAMI con la organización ‘Alfa Medical’ de un convenio para brindar asistencia médica integral y de asistencia a los emigrantes y sus familias en Ecuador, mediante un seguro prepagado.
William Murillo terminó advirtiendo a sus compatriotas presentes en la Sala que “hay grupos de poder que no quieren que triunfemos”, al tiempo que dijo que es bueno transferir a Ecuador las buenas experiencias de la emigración exterior.
Tomó la palabra, a continuación, el embajador Nicolás Issa Obando. En su alocución, transmitió las disculpas del presidente Rafael Correa por no haber podido recalar en Murcia, en su viaje que, días pasados, le llevó a Madrid, Barcelona y Valencia, tras lo que anunció, de nuevo, esa visita pendiente a Murcia para el 26 de octubre próximo. “Les ofrecemos realidades, no promesas”, dijo, para afirmar a continuación que urge profundizar las relaciones bilaterales Ecuador-España, aunque reconoció que nuestro país declara a aquella República andina país prioritario en la agenda exterior española. Anunció la firma con España de un Plan, con fechas entre marzo de 2005 y marzo de 2008, por el que se transferirán 200 millones de dólares de ayuda al Ecuador.
Issa Obando pasó al reconocimiento público de la importante labor que, para Ecuador y España, ejerce la emigración ecuatoriana en el exterior, con el dato de que el colectivo emigrante contribuye a ingresar en la Hacienda española la suma de 31.200 millones de dólares anuales, así como la importante contribución, por la vía de las cotizaciones salariales, al mantenimiento de la Seguridad Social española, un país, dijo, que en su día adoptó una torpe política natalista. Recordó que España aún precisa siete millones de inmigrantes para garantizar las pensiones futuras de la población y precisó que la mitad del crecimiento económico español de los últimos años se debe al aporte de la inmigración. En un momento dado, enfatizó: “Hay que cambiar el Ecuador, derrotar a esos poderes que nos han dominado todos estos años”, para anunciar que en el país hay deseo de cambio, “por eso votó el 82% de la ciudadanía el impulso a la nueva Asamblea Nacional Constituyente”.
Y como medidas para facilitar el regreso, Obando dio a conocer el proyecto de exoneración por diez años del ‘impuesto predial’ (sic), una exención fiscal que permita al emigrante de retorno el acceso a una vivienda digna. Anunció, igualmente, el deseo de impulsar las inversiones españolas en Ecuador, sobre todo en el sector turístico, y que la llamada ‘Comisión de Tránsito’ trata de acelerar la solución al problema de las licencias de residencia.
Trató, también, del derecho al voto de los colectivos ecuatorianos residentes en España, para adelantar que una de las primeras tareas de la Asamblea Nacional Constituyente, una vez constituida, será lograr un tratado de reciprocidad Ecuador-España, que permita al colectivo ecuatoriano aquí residente ejercer ese derecho.
Respecto de la homologación de titulaciones de ecuatorianos residentes en España, Obando calificó el tema de muy difícil, pues nuestro país se rige, en esta materia, por la normativa comunitaria, pero sí está en trámite la “doble titulación”, en virtud de los acuerdos bilaterales existentes, lo que paliaría, en parte, el problema de la pérdida del caudal humano ecuatoriano disperso por el exterior. Anunció la necesidad, asimismo, de actualizar el censo de ecuatorianos residentes en España y la mejora de los consulados existentes así como la creación de otros nuevos.
TURNO DE PREGUNTAS
El turno de intervenciones, muy rico y exhaustivo, pasó repaso, sobre todo, a la situación irregular del colectivo ecuatoriano en Murcia, a las homologaciones de titulaciones, a la situación actual de proyectos de codesarrollo, etc., preguntas que fueron planteadas a la mesa por representantes de la Asociación de Ecuatorinos residentes en Murcia y por miembros de la Asociación Hispano-Ecuatorina “Rumiñahui”.
Respecto de la homologación de titulaciones, hay una previsión de que algunas Universidades ecuatorianas firmen convenios con instituciones educativas españolas, a tal fin. Está a la cabeza de esos trabajos, que ahora se desarrollan en primicia, la Escuela Politécnica del Litoral, institución que, a juicio del embajador, tiene un alto nivel educativo y formativo.
Pasadas las 13:30, y tras terminar el acto con las fotos de familia con ecuatorianos residentes en Murcia, la legación ecuatoriana marchó, como dijimos arriba, a Lorca, para departir con la emigración residente en esa comarca.
PERIPLO POR LA REGIÓN
El encuentro con una nutrida representación de la colonia de trabajadores inmigrantes ecuatorianos residentes en Murcia se dio, en sesión matinal, en el salón de actos del Edificio de Usos Múltiples de la Delegación del Gobierno en Murcia, sita en la Avenida Alfonso X El Sabio de la capital, mientras que, por la tarde, se reunió con representantes de la colonia ecuatoriana en Lorca, en el Complejo Deportivo-Festivo “Las Américas”.
William Murillo llegó a la puerta de la Delegación del Gobierno en Murcia pasadas las 10:30 de la mañana. Allí le aguardaban los representantes de los medios de comunicación regional y un nutrido grupo de compatriotas que lograron, a petición del propio ministro, departir unos momentos y fotografiarse junto al joven mandatario. Acto seguido, se produjo la comparecencia en el salón de actos, acompañado de las personalidades arriba citadas. Terminado el acto, se desplazó a Lorca, para completar la visita en comida de hermandad con los inmigrantes de esa comarca del Valle del Guadalentín.
INTERVENCIONES
William Murillo comenzó saludando y, tras anunciar la próxima visita a Murcia en octubre del presidente electo de Ecuador Rafael Correa, recordó a los inmigrantes presentes en la sala su propio origen de emigrante, pues a los 19 años marchó en situación irregular a Estados Unidos, viaje en el que invirtió un total de 39 días. Recaló en Nueva York, donde trabajó limpiando coches, como jardinero, vendedor temporal, ayudante de mecánico, fregando platos… por lo que, dijo, “conozco la situación en que viven ustedes, y soy sensible a sus necesidades”.
Pasó, seguidamente, a definir el nuevo Ministerio, la Secretaría Nacional de Migrantes, como el resultado de una oferta electoral, ahora hecha realidad, del presidente Correa. Desde ese nuevo Ministerio, dijo tener la intención de que este organismo recién creado se convierta en un centro referencial para la defensa de los derechos humanos.
Como realizaciones inmediatas en estos primeros cien días de Gobierno, enumeró algunos objetivos cumplidos y por cumplir, como el establecer y ejecutar políticas, planes, programas y proyectos participativos, que permitan mejorar las condiciones de vida de los emigrantes, sus familias y su entorno. Y esbozó otros objetivos más concretos y ambiciosos de la SENAMI, tales como apoyar, desde el Estado ecuatoriano, la regularización de los ecuatorianos en el exterior; garantizar la soberanía nacional y auspiciar la integración latinoamericana; luchar por un salario digno, y auspiciar el desarrollo local, la competitividad y la sostenibilidad macroeconómica del país. Y como proyectos inminentes, anunció el lanzamiento de una página web de información para el colectivo inmigrante, el Convenio con España para capacitación técnica y la creación del Banco del Migrante, con posibilidad de que las personas emigradas en el exterior puedan adquirir acciones de la entidad para capitalizarla.
Murillo dio a conocer el Convenio de cooperación institucional entre la SENAMI y la Universidad ecuatoriana de Cuenca que va a permitir la creación de la Universidad del Migrante, para continuidad de estudios a cualquier nivel de quienes no pudieron hacerlo en Ecuador, y que, por medio de Internet, puede ser una realidad. Anunció los trabajos tendentes a la consecución de la doble nacionalidad y el logro de haber enviado a España, con ayuda venezolana, a los 3.000 ciudadanos de Ecuador afectados por el “caso” de Air Madrid. Otra de las realizaciones recientes ha sido la firma de la SENAMI con la organización ‘Alfa Medical’ de un convenio para brindar asistencia médica integral y de asistencia a los emigrantes y sus familias en Ecuador, mediante un seguro prepagado.
William Murillo terminó advirtiendo a sus compatriotas presentes en la Sala que “hay grupos de poder que no quieren que triunfemos”, al tiempo que dijo que es bueno transferir a Ecuador las buenas experiencias de la emigración exterior.
Tomó la palabra, a continuación, el embajador Nicolás Issa Obando. En su alocución, transmitió las disculpas del presidente Rafael Correa por no haber podido recalar en Murcia, en su viaje que, días pasados, le llevó a Madrid, Barcelona y Valencia, tras lo que anunció, de nuevo, esa visita pendiente a Murcia para el 26 de octubre próximo. “Les ofrecemos realidades, no promesas”, dijo, para afirmar a continuación que urge profundizar las relaciones bilaterales Ecuador-España, aunque reconoció que nuestro país declara a aquella República andina país prioritario en la agenda exterior española. Anunció la firma con España de un Plan, con fechas entre marzo de 2005 y marzo de 2008, por el que se transferirán 200 millones de dólares de ayuda al Ecuador.
Issa Obando pasó al reconocimiento público de la importante labor que, para Ecuador y España, ejerce la emigración ecuatoriana en el exterior, con el dato de que el colectivo emigrante contribuye a ingresar en la Hacienda española la suma de 31.200 millones de dólares anuales, así como la importante contribución, por la vía de las cotizaciones salariales, al mantenimiento de la Seguridad Social española, un país, dijo, que en su día adoptó una torpe política natalista. Recordó que España aún precisa siete millones de inmigrantes para garantizar las pensiones futuras de la población y precisó que la mitad del crecimiento económico español de los últimos años se debe al aporte de la inmigración. En un momento dado, enfatizó: “Hay que cambiar el Ecuador, derrotar a esos poderes que nos han dominado todos estos años”, para anunciar que en el país hay deseo de cambio, “por eso votó el 82% de la ciudadanía el impulso a la nueva Asamblea Nacional Constituyente”.
Y como medidas para facilitar el regreso, Obando dio a conocer el proyecto de exoneración por diez años del ‘impuesto predial’ (sic), una exención fiscal que permita al emigrante de retorno el acceso a una vivienda digna. Anunció, igualmente, el deseo de impulsar las inversiones españolas en Ecuador, sobre todo en el sector turístico, y que la llamada ‘Comisión de Tránsito’ trata de acelerar la solución al problema de las licencias de residencia.
Trató, también, del derecho al voto de los colectivos ecuatorianos residentes en España, para adelantar que una de las primeras tareas de la Asamblea Nacional Constituyente, una vez constituida, será lograr un tratado de reciprocidad Ecuador-España, que permita al colectivo ecuatoriano aquí residente ejercer ese derecho.
Respecto de la homologación de titulaciones de ecuatorianos residentes en España, Obando calificó el tema de muy difícil, pues nuestro país se rige, en esta materia, por la normativa comunitaria, pero sí está en trámite la “doble titulación”, en virtud de los acuerdos bilaterales existentes, lo que paliaría, en parte, el problema de la pérdida del caudal humano ecuatoriano disperso por el exterior. Anunció la necesidad, asimismo, de actualizar el censo de ecuatorianos residentes en España y la mejora de los consulados existentes así como la creación de otros nuevos.
TURNO DE PREGUNTAS
El turno de intervenciones, muy rico y exhaustivo, pasó repaso, sobre todo, a la situación irregular del colectivo ecuatoriano en Murcia, a las homologaciones de titulaciones, a la situación actual de proyectos de codesarrollo, etc., preguntas que fueron planteadas a la mesa por representantes de la Asociación de Ecuatorinos residentes en Murcia y por miembros de la Asociación Hispano-Ecuatorina “Rumiñahui”.
Respecto de la homologación de titulaciones, hay una previsión de que algunas Universidades ecuatorianas firmen convenios con instituciones educativas españolas, a tal fin. Está a la cabeza de esos trabajos, que ahora se desarrollan en primicia, la Escuela Politécnica del Litoral, institución que, a juicio del embajador, tiene un alto nivel educativo y formativo.
Pasadas las 13:30, y tras terminar el acto con las fotos de familia con ecuatorianos residentes en Murcia, la legación ecuatoriana marchó, como dijimos arriba, a Lorca, para departir con la emigración residente en esa comarca.