miércoles, 18 de marzo de 2009

BLINDAJES

(Artículo publicado en LA OPINIÓN de Murcia/ 17-03-09)

Con la que está cayendo, me sorprende la capacidad del pueblo llano para soportar estoicamente, sin el menor signo de rebeldía ciudadana, las noticias sobre casos de corrupción, que un día sí y otro también, inundan las páginas de la prensa española. Casos de corrupción que, si exceptuamos Madrid, se extienden, curiosamente, por Andalucía, Murcia y Levante, zonas que antaño fueron la cuna de la Revolución que destronó a la reina Isabel II y, posteriormente, la geografía del levantamiento cantonal, pero que hoy sufren una anestesia paralizante para responder a las agresiones provenientes desde el Poder. Marbella inauguró este ciclo de la corrupción y ésta se ha ido extendiendo por toda la fachada mediterránea hasta recalar en la Comunidad Valenciana. Y, como signos comunes en todos los casos de corruptelas varias, tres elementos, a mi juicio, altamente preocupantes: el primero, ya citado, la aparente connivencia de la población con tal estado de cosas; el segundo, el blindaje con el que se arropan sus ‘actores’, y el tercero la exasperante lentitud de la Justicia para transformar en sentencias claras y firmes los respectivos sumarios. Quiero analizar brevemente cada uno de ellos.

En lo que toca a la escasa respuesta de la sociedad civil ante hechos que trastocan no sólo los más elementales principios de la ética democrática sino que afectan directamente a los bolsillos de todos y cada uno de los contribuyentes, habrá que pensar que tal estado de cosas tiene su claro origen en la consolidación de esta peculiar democracia, que minimiza la condición de ciudadanía y la reduce al derecho al voto, pero sin que existan, en paralelo, instancias democráticas reales que ejerzan de contrapeso de los excesos del Poder. Y el Poder político se ha encargado de adormecer, durante estos últimos treinta años, el empuje y el ansia de participación en los asuntos públicos de las entidades asociativas de distinto signo que florecieron en los albores de la Transición. Hoy, más que ciudadanos y ciudadanas, pareciera que somos una masa amorfa de individuos-consumidores, con unos valores hedonistas e individualistas que anestesian la capacidad de pensar y de actuar.

El segundo elemento, no menos preocupante, es el blindaje que rodea a quienes incurren en claros casos de corrupción. En la prensa ha sido noticia la peculiar forma de ‘hacer Nación’ de Núñez Feijoo, al anunciar que, como presidente de la Xunta gallega, iba a adquirir un coche blindado, un Citroën C6 valorado en la módica suma de 120.000 euros (20 millones de pesetas de las de antes). Curiosa forma, como se ve, de responder al espíritu de austeridad que había anunciado en su campaña y, al tiempo, consolidar los puestos de trabajo de esa multinacional francesa con sede en Vigo. Pero hay otros blindajes. Se blinda Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, que ha cerrado en falso la Comisión de investigación de la Asamblea sobre los casos de espionaje (¿alguien pensaba que una Cámara con mayoría del PP iba a adoptar otra decisión que no fuera ésa?); se blinda Francisco Camps, president de la Generalitat Valenciana, al negarse a tratar en sede parlamentaria su posible implicación en la Operación Gürtel, destapada por Garzón, y, en nuestra Comunidad, se blinda Valcárcel, al no admitir la parte de responsabilidad política que le pueda caber por el hecho de haber depositado su confianza en una persona, nombrada dos veces consejero, que ahora está bajo sospecha.

Y, ante todo ello, me preocupa, como ciudadano, la exasperante lentitud de la Justicia. A la vista de la gravedad de los casos de corrupción que han venido denunciándose, ¿es de recibo que transcurra tanto tiempo sin que afloren sentencias condenatorias claras? ¿Podríamos pensar que no es tan nítida la independencia judicial y que, por consiguiente, sobre ese tercer pilar del Estado median presiones indeseadas desde el Poder para ralentizar esos procesos? ¿Hay también algún tipo de blindaje judicial para los políticos y empresarios corruptos?


Diego Jiménez http:// desdemicornijal.blogspot.com

8 comentarios:

supersalvajuan dijo...

La justicia no existe; existen tipos que interpretan la justicia, y así nos va. Hay sensación de impunidad.

Joaquín Navarro Gómez dijo...

Hola Diego, supongo que a esta altura tu ya sabes bien que la justicia está más que politizada. Coincido contigo en la falta de acción de la llamada sociedad civil, pero creo que la sociedad civil ahora está en otra cosa... subsistir. Por cierto, al respecto, y de esto tu sabes más que yo, ¿dónde y a qué se decidan esos sindicatos que viven de nuestros impuestos?... Por último, algo que te hará sonreir, nombras casos de corrupción, y te olvidas de nombrar aquellos que pertenecen al PSOE (Andalucía, Alcaucín...)

Un saludo.

Sarashina dijo...

Yo creo, amigo Diego, que la izquierda y los movimientos sociales están laminados por muchos años de corrupción y políticas de derechas. Los ciudadanos y ciudadanas consideran que no es cosa suya y que no les afecta directamente. Cuando las cosas se pongan mal del todo, definitivamente mal, no sé si reaccionarán, pero el proceso de reconstrucción del tejido social puede ser lento, más aún que la justicia, que ya es decir.
La corrupción actual del PSOE, y no es por defenderlos, que me tienen cabreada, no es comparable a la corrupción actual del PP. Lo de la derecha es ya una absoluta falta de vergüenza, a la que se añade el cinismo más descarado.

Anónimo dijo...

Sobre la participación de IU en la manifestacion del agua para todos:

El protagonismo fue para Camps, Valcarcel y el agua para todos.

La mani llena de banderas de España, no es que este en contra, pero es propio de los fachas.

Vuestra estrategia, de IU, no es muy inteligente.

¿qué tal estar al son del PP en la mani? lo habéis llevado bien?
>
>Mira, entre el consejero de interior de Barcelona,que mandó a los mossos contra los anti-Bolonia, y vuestra participación en esa mani murciana organizada por el PP, estáis listos para convertiros en
EXTRA-PARLAMENTARIOS.

Diego J. dijo...

Aunque no suelo contestar a comentarios anónimos, a este querido señor que no quiere identificarse le diré que yo no acudí a esa manifestación, aunque la dirección regional decidió apoyarla. Dice vamos camino de convertirnos en extraparlamentarios, ¿y qué hubiera ocurrido si en una Región como ésta IURM dijera no al Trasvase, una obra consolidada y amjortizada? Creo que, entonces, en la próxima convocatoria electoral nuestro apoyo no llegaría ni al 1% de la población. Y que conste que, como a mí, a los compañeros y compañeras de IU les repugna asistir junto al PP a una manifestación que, recuerdo, no era del PP, sino de los regantes, aunque se la hayan apropiado los de la gaviota azul.

Anónimo dijo...

lo que esta claro es que la corrupion politica llega a todos los sitios en esta sociedad capitalista necesitamos una limpia tota y desde abajo

Anónimo dijo...

Ahora resulta que criticar las actuaciones desproporcionadas de las fuerzas de seguridad y hacerse la foto junto a los del "Agua para votos" es "pecado extraparlamentario", y no una burda manipulación partidista de la realidad en ambas cuestiones aquí planteadas. Siempre he pensado que el concepto de religión es mucho más amplio de lo que nos enseñan en las escuelas. Hay sectores de la izquierda que bien podrían compararse con cualquier secta, la del OPUS, por ejemplo, es decir, no tienen escrúpulos, el "estatus" manda. Con tanto dejar hacer a los parlamentarios esto cada vez se parece más a la Italia de Berlusconi. No me extraña que los jóvenes huyan del apoltronamiento al que nos tienen acostumbrados la clase política.

Rafael del Barco Carreras dijo...

Más sobre corrupción...

LUIS PASCUAL ESTEVILL Y RAFAEL JIMÉNEZ DE PARGA.


Rafael del Barco Carreras


11 de Mayo 2009. Juicio por extorsión y denuncias falsas. Hoy su declaración ha defraudado. No se acordaba de nada y rectifica confesiones anteriores. E insiste que dictaría lo que por su SOBERANÍA, sic, dictó y ejecutó. Desafiante. En 1994, cuando juntos firman un acta judicial en que cambian por 50 millones de las pesetas de entonces la prisión de tres acusados por libertad con fianza relatando una serie de operaciones bancarias inexistentes (hecho probado en el juicio del 2004, condenado él, Juan Piqué Vidal y otros) son algo más que dos licenciados en derecho aprovechando una oportunidad. Recordemos, eran:

Luis Pascual Estevill, titular del Juzgado n. 26 y sustituto del 10, Doctor en Derecho y miembro de la Academia de Jurisprudencia y Legislación de Cataluña, y al siguiente año nombrado a propuesta de CIU, y acuerdo unánime del resto de fuerzas políticas, Vocal del CONSEJO GENERAL DEL PODER JUDICIAL Y SU DELEGADO PARA CATALUÑA. En la práctica máximo Poder Judicial en Cataluña. Poder que ejerció expedientando a casi la mayoría de juzgados.

Rafael Jiménez de Parga, Catedrático de Derecho Mercantil de la Universidad de Barcelona, Premio Fundación Montalban, ex Decano de la Facultad de Derecho y Vicerrector de la Universidad de Barcelona. Además su hermano Manuel, su socio de bufete, es Presidente y ex del Constitucional y Supremo, ex Ministro de Trabajo, ex Catedrático, Decano y Rector de la Universidad, Honoris Causa, Embajador ante la Organización Internacional de Trabajo, etc.etc.

!Buenos elementos!, quien me acusaba en el caso Consorcio por encargo del Ayuntamiento de Serra y Maragall, 1980, Bufete Jiménez de Parga, y quien me defendía, Luis Pascual Estevill, entonces recién doctorado por un Tribunal presidido por Manuel Jiménez de Parga… TRES AÑOS PREVENTIVO POR UN DELITO QUE NO COMETÍ… unos terrenos que en principio existían…que se trocaron por otros inexistentes… en realidad una simple promesa de compra anulada en la que no medió dinero… y condenado por “encubrir” a Antonio de la Rosa Vázquez, padre de Javier de la Rosa, a quien seguro le costó mucho más que 50 millones cambiar culpables en el CASO CONSORCIO DE LA ZONA FRANCA. Ver www.lagrancorrupcion.com y www.lagrancorrupcion.blogspot.com