En clave de humor, la representación es una parodia de la incomprensión y los miedos de la sociedad española ante el inmigrante.
Diego Jiménez/Murcia.- La tenacidad que despliega Manoli Sevilla -una maestra que entiende el Teatro, con mayúsculas, desde la dimensión pedagógica (de hecho lo ha llevado a la Escuela) y que recogió el legado que sembró en su día el teatrero argentino Edmundo Chacour, su compañero sentimental fallecido hace unos años- sigue dando sus frutos. Al frente de la compañía de teatro que lleva el nombre de este actor y director argentino, Manoli ha puesto ahora en escena, en el centro cultural “Puertas de Castilla” de la capital murciana, la representación teatral “A-cogiéndote”, obra que parodia los vicios, los temores hacia el diferente, las incomprensiones, en suma, que siente la sociedad española ante el fenómeno de la inmigración. Con una lograda puesta en escena, con una música que combina el “rapp” con el rock, el cancionero español, temas en árabe y la sugerente melodía clásica del “Adagietto”, de Gustav Mahler, a lo largo de la representación desfila toda una galería de personajes para evidenciar la hipocresía que adorna, en ocasiones, el aparente trabajo altruista de las ONG, nombradas socarronamente en la obra como “onejejes”, junto con las trabas burocráticas que han de sortear para acceder al mercado laboral quienes llegan a nuestras tierras con toda una preparación que, a la postre, en el caso de las mujeres sobre todo, les va a permitir trabajar en el servicio doméstico.
Inspirada en hechos reales
Manoli, directora y actriz destacada en la obra, ha logrado reunir un elenco de actores jóvenes y cuenta con la experiencia de una actriz aficionada, Beatriz López, pero rodada ya en multitud de obras de la compañía. Precisamente el hecho de que en el reparto figuren personas que han sufrido en sus carnes el drama de la inmigración, como Rachid Boukhzer y Nohora Rincón, hace que la obra, pese a estar configurada en tono de humor, sea más creíble al espectador, que rápidamente se rinde ante el calor y el entusiasmo que los actores ponen en sus gestos y movimientos. La elaboración del guión, basado en situaciones reales vividas por inmigrantes que han recalado en nuestra tierra, ha sido colectiva y, al decir de sus autores, esta puesta en escena “no es más que una parodia, un guiño a nuestro interior, que pretende, mediante la risa, que sigamos reflexionando sobre ese fenómeno social que vive en la puerta de al lado”. Y así, la alocución final “Queríais mano de obra y vinieron personas”, que los actores exhiben en una pancarta, es una clara denuncia de la infravaloración social de los empresarios, los políticos y la sociedad en general hacia el inmigrante.
Los protagonistas
Además de los actores expresados arriba, otros protagonistas son Susana Prat, Miguel Gálvez, Marina Martínez y Rubén López. En la ficha técnica, se cuenta con Miguel Gálvez a cargo de la escenografía, Jorge Castro, encargado del sonido y la iluminación, mientras que la dirección corre a cargo de Manoli Sevilla, ayudada de Beatriz López en la producción de la obra.
Diego Jiménez/Murcia.- La tenacidad que despliega Manoli Sevilla -una maestra que entiende el Teatro, con mayúsculas, desde la dimensión pedagógica (de hecho lo ha llevado a la Escuela) y que recogió el legado que sembró en su día el teatrero argentino Edmundo Chacour, su compañero sentimental fallecido hace unos años- sigue dando sus frutos. Al frente de la compañía de teatro que lleva el nombre de este actor y director argentino, Manoli ha puesto ahora en escena, en el centro cultural “Puertas de Castilla” de la capital murciana, la representación teatral “A-cogiéndote”, obra que parodia los vicios, los temores hacia el diferente, las incomprensiones, en suma, que siente la sociedad española ante el fenómeno de la inmigración. Con una lograda puesta en escena, con una música que combina el “rapp” con el rock, el cancionero español, temas en árabe y la sugerente melodía clásica del “Adagietto”, de Gustav Mahler, a lo largo de la representación desfila toda una galería de personajes para evidenciar la hipocresía que adorna, en ocasiones, el aparente trabajo altruista de las ONG, nombradas socarronamente en la obra como “onejejes”, junto con las trabas burocráticas que han de sortear para acceder al mercado laboral quienes llegan a nuestras tierras con toda una preparación que, a la postre, en el caso de las mujeres sobre todo, les va a permitir trabajar en el servicio doméstico.
Inspirada en hechos reales
Manoli, directora y actriz destacada en la obra, ha logrado reunir un elenco de actores jóvenes y cuenta con la experiencia de una actriz aficionada, Beatriz López, pero rodada ya en multitud de obras de la compañía. Precisamente el hecho de que en el reparto figuren personas que han sufrido en sus carnes el drama de la inmigración, como Rachid Boukhzer y Nohora Rincón, hace que la obra, pese a estar configurada en tono de humor, sea más creíble al espectador, que rápidamente se rinde ante el calor y el entusiasmo que los actores ponen en sus gestos y movimientos. La elaboración del guión, basado en situaciones reales vividas por inmigrantes que han recalado en nuestra tierra, ha sido colectiva y, al decir de sus autores, esta puesta en escena “no es más que una parodia, un guiño a nuestro interior, que pretende, mediante la risa, que sigamos reflexionando sobre ese fenómeno social que vive en la puerta de al lado”. Y así, la alocución final “Queríais mano de obra y vinieron personas”, que los actores exhiben en una pancarta, es una clara denuncia de la infravaloración social de los empresarios, los políticos y la sociedad en general hacia el inmigrante.
Los protagonistas
Además de los actores expresados arriba, otros protagonistas son Susana Prat, Miguel Gálvez, Marina Martínez y Rubén López. En la ficha técnica, se cuenta con Miguel Gálvez a cargo de la escenografía, Jorge Castro, encargado del sonido y la iluminación, mientras que la dirección corre a cargo de Manoli Sevilla, ayudada de Beatriz López en la producción de la obra.
2 comentarios:
¡Qué buena pinta tenía!
Una pena no haber sabido de su actuación.
Gracias por éste rinconcito compañero, seguiremos pasando por aquí.
Un fuerte abrazo desde Cartagena.
Como siempre el grupo Edmundo Chacour pone su grano de arena para sacar a la luz parte de la temática social española. La reflexión final de la protagonista de A-cogiendote fue mi pequeña contribución a esta obra. "De inmigraciones y limbos" y podeis leerla completa en mi blog.
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